domingo, 19 de julio de 2015

UNA NUEVA OPCIÓN CONTRA EL CÁNCER DE MAMA

Se trata del primer anticuerpo conjugado contra el cáncer de mama en España. Dicho así quizás no diga mucho para la mayoría de personas, pero este tratamiento aprobado ahora en nuestro país supondrá el aumento de la superviviencia en un grupo de mujeres cuyo tumor era considerado hace unos años el peor de este tipo y ahora, con la llegada de esta opción terapéutica, "se abre un gran número de oportunidades de combinación con otros medicamentos" y sin efecto secundarios.


Quien hace esta afirmación tan positiva es Miguel Martín, jefe del Servicio de Oncología del Hospital Gregorio Marañón de Madrid y presidente del Grupo Geicamn de Investigación en Cáncer de mama, quien ha presentado esta mañana el nuevo fármaco denominado Kadcyla, que auna en un solo medicamento una terapia biológica (Trastuzumab, un anticuerpo) y un quimioterápico (Emtansina).
Junto a Martín han estado explicando el mecanismo de acción y sus efectos sobre las pacientes Joan Albanell, jefe del Servicio de Oncología del Hospital del Mar de Barcelona, y Ana Lluch, jefe del Servicio de Hematología y Oncología del Hospital Clínico de Valencia. Ambos han señalado la gran ventaja de esta terapia: "el novedoso mecanismo de acción hace que éste sea la mejor opción terapéutica para pacientes con cáncer de mama metastásico HER2+ que han dejado de responder al tratamiento con taxanos y con Trastuzumab", afirma Albanell.
Aproximadamente entre el 20 y el 25% de las mujeres con cáncer de mama tienen un tipo denominado HER2+. Las siglas indican que en la membranas de las células tumorales hay un receptor (una proteína) en unos niveles muchísimo más elevados que en personas sin este cáncer. "Si en una célula normal hay entre 10.000 y 20.000 proteínas H2, sin un papel relevante, en las células tumorales H2+ hay entre un millón y dos millones en la superficie de cada célula. Cuando esta proteína está en exceso, es el director del crecimiento tumoral", explica Albanell.
La nueva terapia, compuesta por un anticuerpo y un quimioterápico, logra a través de un enlace muy estable entre las dos moléculas que el compuesto sólo actúe en las células tumorales. Trastuzumab (el anticuerpo) se dirige directamente a las proteínas H2 y permite la entrada del quimioterápico en la célula. Una vez en su interior el enlace de estas dos moléculas se rompe permitiendo que la quimioterapia entre en acción, pero sólo frente a estas células cancerígenas y no en las sanas, de ahí sus pocos efectos secundarios.
Esta combinación es "extremadamente potente". "Con este fármaco se ha ganado en especificidad para pacientes que antes tenían muchos problemas de toxicidad. El avance en precisión es notable, la terapia cambia la historia natura de este cáncer porque aumenta la supervivencia. Su uso es obligatorio, no hay discusión sobre su precio", aclara Martín que no ha querido precisar el coste de esta terapia y tan sólo ha indicado que es "elevado".
Tal y como ha insistido Lluch, con estas pacientes "hoy todos estamos más contentos porque no solo tenemos un fármaco de primera elección (Trastuzumab) sino que cuando se hacen resistentes a él y progresa su enfermedad ahora contamos con un nuevo tratamiento que no genera toxicidad, ni alopecia o náuseas ni vómitos".
La terapia que se administra por vía intravenosa una vez cada tres semanas puede prolongarse durante ocho o nueve meses, aunque hay pacientes que llevan tratándose uno o dos años sin complicaciones derivadas de la toxicidad.
Aunque la superviviencia sólo se ve aumentada cinco o seis meses en enfermedad avanzada, Martín señala que actualmente hay varios estudios en marcha que analizan la eficacia de la terapia en fase precoz del cáncer. "Esperamos que las recaídas disminuyan cuando se da el tratamiento de manera precoz para que no lleguen a metastásicas", afirma Martin.
El tratamieno ahora podrá ser prescrito por cualquier oncólogo español ante pacientes en fase avanzada, un 20% de las mujeres con este tipo de cáncer, algo que antes sólo podían hacer algunos especialistas con una importante burocracia de por medio.
Será en los próximos meses o años cuando se conozca si el primer anticuerpo conjugado puede tener un papel más importante en este cáncer pues ahora se abren "ventanas de oportunidades" para combinarlo con otros tratamientos, como hormonas, o administrarlo en distintos momentos de la evolución del tumor.

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